Propósitos de año nuevo

Tengo que reconocer que no creo en los propósitos de año nuevo tal y como yo los he aprendido: tener más paciencia, madrugar para hacer algo bueno que no hago, trabajar menos... Para otros los propósitos son dejar de fumar, ir al gimnasio... Pero los propósitos así expresados suelen ser ataques personales contra uno mismo porque se basan en la obligación sobre algo que está en la raíz de nuestro ser, el deber, y suelen acabar en frustración.

Yo creo más en los deseos de año nuevo. Cuando yo lo deseo me pongo en contacto con mi corazón. Puedo hablar con mi deseo, decirle el motivo por el que le quiero en mi vida, priorizar sin prisas los pasos que sé que puedo dar para estar mejor ( una conversación pendiente, reorganizar mi tiempo para que quepa algo que me ayuda a descansar, hacer una llamada para dar un paseo renunciando a todo lo que en ese tiempo podría "hacer"...). Mi deseo puede ayudar a otros a encontrarse con sus propios deseos. Sin tiempo y sin obligación.

Optar por lo que deseo también supone renunciar pero es muy diferente a la obligación de los propósitos. Me obligo por imagen, exigencia, falta de aceptación... En el deseo hay que renunciar para poder ser más yo, más libre, más feliz.

Feliz Año Nuevo lleno de buenos deseos.

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